Las bolsas de recogida de orina son productos sanitarios generalmente compuestos por PVC o similar, y que se usan como recipiente para recolectar la orina en pacientes que sufren incontinencia o retención urinaria, o bien que han sido intervenidos quirúrgicamente. Estos dispositivos se deben utilizar junto con un colector de recogida de orina o bien mediante una sonda vesical.
Existen bolsas de orina de diferentes tamaños, aunque las más comunes son las siguientes:
- De 2 Litros (también conocidas como bolsas de orina de cama) utilizadas en aquellos pacientes inmovilizados en cama o los que la utilicen durante la noche. Este modelo se cuelga en el lateral de la cama para evitar entorpecer al paciente, y para facilitar también su manejo por parte del personal sanitario.
- De 750ml (también conocidas como bolsas de pierna) que utilizan los pacientes en movimiento en su día a día. Son bolsas que se agarran a la pierna del paciente mediante unas cintas elásticas y de forma cómoda y discreta se pueden llevar por debajo de la ropa, sin que sea percibida por otros.
Tipos de bolsas de orina:
Además de diferenciarse por el tamaño (2 Litros o 750ml) según se utilicen en pacientes encamados o en movimiento, las bolsas de orina pueden tener otra serie de elementos para distinguirlas y permiten al profesional sanitario evaluar cuál es la más indicada para cada tipo de paciente.
- Bolsas con Válvula Antirretorno: la válvula antirretorno evita que tanto el líquido como los gases asciendan por el tubo en dirección contraria, y por tanto evitan posible contaminación e infecciones en el paciente.
- Bolsas con Válvula de Vaciado: permiten vaciar la bolsa de forma rápida y cómoda por parte del paciente o profesional sanitario. La válvula está situada en la parte inferior de la bolsa y puede ser de dos tipos:
- Válvula tradicional: permite el vaciado del contenido tirando el tapón/capuchón hacia abajo.
- Válvula en cruz (o free-flow): permiten un vaciado más cómodo, ya que simplemente hay que presionar hacia el lateral el conector.
- Bolsas con asa troquelada: algunos modelos incluyen un asa troquelada en la bolsa que permite que el paciente pueda transportar la bolsa de forma cómoda.
- Bolsas con tubo de largo especial: las bolsas de orina de cama suelen tener un tubo con un largo de aproximadamente 90cm mientras que las de pierna suelen ser de unos 35cm. Pero existen también modelos que incluyen largos especiales. En el caso de las bolsas de cama existe disponibilidad de tubo de 1,20 metros de longitud, lo cual resulta más cómodo para aquellos pacientes que estén en camas más grandes. Y en el caso de las de pierna, pueden existir con tubo más corto (10 cm) o bien con tubo más largo (55cm) para aquellos pacientes más altos.
Consejos sobre cómo utilizar una bolsa de orina:
Las bolsas de orina deben ser utilizadas por un solo paciente y son para un solo uso, es decir, no se deben reutilizar ya que podría haber riesgo de infección.
Siempre se deben colocar por debajo del nivel de la vejiga para evitar el reflujo de la orina.
Evitar aplastar el tubo para no interrumpir el flujo de la orina.
En el caso de utilizar bolsas con válvula de vaciado, asegurarse siempre que ésta permanece cerrada antes de su uso.
Siempre se debe sustituir la bolsa antes de alcanzar su capacidad máxima.
Vaciar el contenido de la bolsa antes de desecharla.
Nunca coger la bolsa llena por el tubo, para evitar que pueda romperse y desprenderse su contenido.
Consulte siempre con un profesional sanitario antes de utilizar cualquier bolsa de orina.